jueves, 26 de julio de 2012

ALMA DE CRISTO

Alma de Cristo, santifícame.
Cuerpo de Cristo, sálvame.
Sangre de Cristo, embriágame.
Agua del costado de Cristo, lávame.
Pasión de Cristo, confórtame.
¡Oh, buen Jesús!, óyeme.
Dentro de tus llagas, escóndeme.
No permitas que me aparte de Ti.
Del maligno enemigo, defiéndeme.
En la hora de mi muerte, llámame.
Y mándame ir a Ti.
Para que con tus santos te alabe.
Por los siglos de los siglos. Amén.

martes, 24 de julio de 2012

ORACION A LA SANGRE DE CRISTO

Oración de la Sangre de Cristo
Sangre de Cristo.jpg (19201 bytes)
Señor Jesús, en tu nombre y con
el Poder de tu Sangre Preciosa
sellamos toda persona, hechos o
acontecimientos a través de los cuales
el enemigo nos quiera hacer daño.
Con el Poder de la Sangre de Jesús
sellamos toda potestad destructora en
el aire, en la tierra, en el agua, en el fuego,
debajo de la tierra, en las fuerzas satánicas
de la naturaleza, en los abismos del infierno,
y en el mundo en el cual nos movemos hoy.
Con el Poder de la Sangre de Jesús
rompemos toda interferencia y acción del maligno.
Te pedimos Jesús que envíes a nuestros hogares
y lugares de trabajo a la Santísima Virgen
acompañada de San Miguel, San Gabriel,
San Rafael y toda su corte de Santos Ángeles.
Con el Poder de la Sangre de Jesús
sellamos nuestra casa, todos los que la habitan
(nombrar a cada una de ellas),
las personas que el Señor enviará a ella,
así como los alimentos y los bienes que
Él generosamente nos envía
para nuestro sustento.
Con el Poder de la Sangre de Jesús
sellamos tierra, puertas, ventanas,
objetos, paredes,  pisos y el aire que respiramos,
y en fe colocamos un círculo de Su Sangre
alrededor de toda nuestra familia.
Con el Poder de la Sangre de Jesús
sellamos los lugares en donde vamos
a estar este día, y las personas, empresas
o instituciones con quienes vamos a tratar
(nombrar a cada una de ellas).
Con el Poder de la Sangre de Jesús
sellamos nuestro trabajo material y espiritual,
los negocios de toda nuestra familia,
y los vehículos, las carreteras, los aires,
las vías y cualquier medio de transporte
que habremos de utilizar.
Con Tu Sangre preciosa sellamos los actos,
las mentes y los corazones de todos los habitantes
y dirigentes de nuestra Patria a fin de que
Tu Paz y Tu Corazón al fin reinen en ella.
Te agradecemos Señor por Tu Sangre y
por Tu Vida, ya que gracias a Ellas
hemos sido salvados y somos preservados
de todo lo malo. 
Amén.

domingo, 22 de julio de 2012

DIOS ES EL PASTOR DE LA HUMANIDAD


CASTEL GANDOLFO, domingo 22 julio 2012 (ZENIT.org).-
Esta mañana, a las 12 horas, Benedicto XVI se asomó al balcón del patio del Palacio Apostólico de Castel Gandolfo y recitó el Ángelus junto a los fieles y a los peregrinos presentes. Ofrecemos las palabras del papa al introducir la oración mariana.

*****
¡Queridos hermanos y hermanas!
La Palabra de Dios de este domingo nos vuelve a proponer un tema clave y siempre fascinante de la Biblia: nos recuerda que Dios es el pastor de la humanidad. Esto significa que Dios quiere para nosotros la vida, quiere guiarnos hacia buenos pastos, en el que podemos alimentarnos y reposar; no quiere que nos perdamos y que muramos, sino que lleguemos al destino de nuestro camino, que es precisamente la plenitud de la vida. Eso es lo que cada padre y cada madre quiere para sus hijos: el bien, la felicidad, la realización. En el Evangelio, Jesús se presenta como el Pastor de las ovejas perdidas de la casa de Israel. Su mirada sobre la gente es una mirada "pastoral". Por ejemplo, en el Evangelio de este domingo, se dice que "al desembarcar, vio mucha gente, sintió compasión de ellos, pues estaban como ovejas que no tiene pastor, y se puso a enseñarles muchas cosas" (Mc. 6, 34). Jesús encarna a Dios Pastor con su forma de predicar y con su obra, cuidando de los enfermos y de los pecadores, de los que están "perdidos" (cf. Lc. 19,10), para traerlos de vuelta a salvo, en la misericordia del Padre.
Entre las "ovejas perdidas" que Jesús ha salvado hay también una mujer llamada María, de la localidad de Magdala, en el lago de Galilea, y por eso llamada Magdalena. Hoy es su memoria litúrgica en el calendario de la Iglesia. Dice el evangelista Lucas que de ella Jesús hizo huir siete demonios (cf. Lc. 8,2), es decir, la rescató de una total esclavitud al mal.
¿En qué consiste esta profunda sanación que Dios obra a través de Jesús? Se trata de una paz verdadera, completa, fruto de la reconciliación de la persona con sí misma y en todas sus relaciones: con Dios, con los demás, con el mundo. En efecto, el Diablo siempre está tratando de arruinar la obra de Dios, sembrando la división en el corazón humano, entre el cuerpo y el alma, entre el hombre y Dios, en las relaciones interpersonales, sociales, internacionales, e incluso entre el hombre y la creación. El mal siembra la guerra; Dios crea la paz. De hecho, como dice san Pablo: Cristo «es nuestra paz: el que de dos pueblos hizo uno, derribando el muro divisorio, la enemistad, a través de su carne" (Ef. 2,14). Para llevar a cabo esta obra de reconciliación radical Jesús, el Buen Pastor, ha debido convertirse en Cordero, "el Cordero de Dios… que quita el pecado del mundo" (Jn. 1,29). Sólo así ha podido llevar a cabo la maravillosa promesa del Salmo: "Bondad y amor me acompañarán todos los días de mi vida, / y habitaré en la casa de Yahvé / un sinfín de días" (22/23, 6).
Queridos amigos, estas palabras nos hacen vibrar el corazón, porque expresan nuestro deseo más profundo, diciendo para lo que hemos sido creados: ¡para la vida, la vida eterna! Son las palabras de aquellos que, como María Magdalena, han experimentado a Dios en sus vidas y conocen su paz. Palabras más que que nunca verdaderas en los labios de la Virgen María, que vive ya para siempre en los pastos del Cielo, donde la ha conducido el Cordero Pastor. ¡María, Madre de Cristo, nuestra paz, ruega por nosotros!
Traducido del original italiano por José Antonio Varela V.
©Librería Editorial Vaticana

sábado, 14 de julio de 2012

LA VIRGEN DEL CARMEN Y EL ESCAPULARIO

La Virgen del Carmen ...y el escapulario
 
La Virgen del Carmen ...y el escapulario


El próximo 16 de Julio recordaremos a Nuestra Señora del Carmen. Reflexionemos hoy un poco sobre esta advocación y las grandes promesas de su escapulario.

Los carmelitas tienen, entre otros, el mérito de haber llevado esta advocación mariana a todos los estratos del pueblo cristiano.

En el siglo XII algunos eremitas se retiraron al Monte Carmelo, con San Simón Stock.

La Virgen Santísima prometió a este santo un auxilio especial en la hora de la muerte a los miembros de la orden carmelitana y a cuantos participaran de su patrocinio llevando su santo escapulario.

Los Carmelitas han sido conocidos por su profunda devoción a la Santísima Virgen. Ellos interpretaron la nube de la visión de Elías (1 Reyes 18, 44) como un símbolo de la Virgen María Inmaculada. Ya en el siglo XIII, cinco siglos antes de la proclamación del dogma, el misal Carmelita contenía una Misa para la Inmaculada Concepción.


La estrella del Mar y los Carmelitas.

Los marineros, antes de la edad de la electrónica, dependían de las estrellas para marcar su rumbo en el inmenso océano. De aquí la analogía con La Virgen María quien como, estrella del mar, nos guía por las aguas difíciles de la vida hacia el puerto seguro que es Cristo.

Por la invasión de los sarracenos, los Carmelitas se vieron obligados a abandonar el Monte Carmelo. Una antigua tradición nos dice que antes de partir se les apareció la Virgen mientras cantaban el Salve Regina y ella prometió ser para ellos su Estrella del Mar. Por ese bello nombre conocían también a la Virgen porque el Monte Carmelo se alza como una estrella junto al mar.


Los Carmelitas y la Virgen del Carmen se difunden por Europa.

La Virgen Inmaculada, Estrella del Mar, es la Virgen del Carmen, es decir a la que desde tiempos remotos allí se venera. Ella acompañó a los Carmelitas a medida que la orden se propagó por el mundo. A los Carmelitas se les conoce por su devoción a la Madre de Dios, ya que en ella ven el cumplimiento del ideal de Elías. Incluso se le llamó: "Los hermanos de Nuestra Señora del Monte Carmelo". En su profesión religiosa se consagraban a Dios y a María, y tomaban el hábito en honor ella, como un recordatorio de que sus vidas le pertenecían a ella, y por ella, a Cristo.


¿Qué es el Escapulario carmelita?

Los seres humanos nos comunicamos por símbolos. Así como tenemos banderas, escudos y también uniformes que nos identifican. Las comunidades religiosas llevan su hábito como signo de su consagración a Dios.

Los laicos no pueden llevar hábito, pero los que desean asociarse a los religiosos en su búsqueda de la santidad pueden usar el escapulario. La Virgen dio a los Carmelitas el escapulario como un hábito miniatura que todos los devotos pueden llevar para significar su consagración a ella. Consiste en un cordón que se lleva al cuello con dos piezas pequeñas de tela color café, una sobre el pecho y la otra sobre la espalda. Se usa bajo la ropa. Junto con el rosario y la medalla milagrosa, el escapulario es uno de los mas importantes sacramentales marianos.

Dice San Alfonso Ligorio, doctor de la Iglesia: "Así como los hombres se enorgullecen de que otros usen su uniforme, así Nuestra Señora Madre María está satisfecha cuando sus servidores usan su escapulario como prueba de que se han dedicado a su servicio, y son miembros de la familia de la Madre de Dios."


El escapulario es un sacramental.

Un sacramental es un objeto religioso que la Iglesia haya aprobado como signo que nos ayuda a vivir santamente y a aumentar nuestra devoción. Los sacramentales deben mover nuestros corazones a renunciar a todo pecado, incluso al venial.

El escapulario, al ser un sacramental, no nos comunica gracias como hacen los sacramentos. Las gracias nos vienen por nuestra respuesta de amor a Dios y de verdadera contrición del pecado, lo cual el sacramental debe motivar.


¿Cómo surgió el escapulario?

La palabra escapulario viene del Latín "scapulae" que significa "hombros". Originalmente era un vestido superpuesto que cae de los hombros y lo llevaban los monjes durante su trabajo. Con el tiempo se le dio el sentido de ser la cruz de cada día que, como discípulos de Cristo llevamos sobre nuestros hombros. Para los Carmelitas particularmente, pasó a expresar la dedicación especial a la Virgen Santísima y el deseo de imitar su vida de entrega a Cristo y a los demás.


La Virgen María entrega el escapulario el 16 de julio de 1251.

En el año 1246 nombraron a San Simón Stock general de la Orden Carmelita. Este comprendió que, sin una intervención de la Virgen, a la orden le quedaba poco tiempo. Simón recurrió a María poniendo la orden bajo su amparo, ya que ellos le pertenecían. En su oración la llamó "La flor del Carmelo" y la "Estrella del Mar" y le suplicó la protección para toda la comunidad.

En respuesta a esta ferviente oración, el 16 de julio de 1251 se le aparece la Virgen a San Simón Stock y le da el escapulario para la orden con la siguiente promesa:

"Este debe ser un signo y privilegio para ti y para todos los Carmelitas: quien muera usando el escapulario no sufrirá el fuego eterno"

Aunque el escapulario fue dado a los Carmelitas, muchos laicos con el tiempo fueron sintiendo el llamado de vivir una vida mas comprometida con la espiritualidad carmelita y así se comenzó la cofradía del escapulario, donde se agregaban muchos laicos por medio de la devoción a la Virgen y al uso del escapulario. La Iglesia ha extendido el privilegio del escapulario a los laicos.


Explicación de la Promesa:

Muchos Papas, santos como San Alfonso Ligorio, San Juan Bosco, San Claudio de la Colombiere, y San Pedro Poveda, tenían una especial devoción a la Virgen del Carmen y llevaban el escapulario. Santos y teólogos católicos han explicado que, según esta promesa, quien tenga la devoción al escapulario y lo use, recibirá de María Santísima a la hora de la muerte, la gracia de la perseverancia en el estado de gracia (sin pecado mortal) o la gracia de la contrición (arrepentimiento). Por parte del devoto, el escapulario es una señal de su compromiso a vivir la vida cristiana siguiendo el ejemplo perfecto de la Virgen Santísima.


El escapulario tiene 3 significados:

  • El amor y la protección maternal de María: El signo es una tela o manto pequeño. Vemos como María cuando nace Jesús lo envuelve en un manto. La Madre siempre trata de cobijar a sus hijos.

    Envolver en su manto es una señal muy maternal de protección y cuidado. Señal de que nos envuelve en su amor maternal. Nos hace suyos. Nos cubre de la ignominia de nuestra desnudes espiritual.

    Vemos en la Biblia:

    -Dios cubrió con un manto a Adán y Eva después de que pecaron. (manto - signo de perdón)

    -Jonás le dio su manto a David: símbolo de amistad -Elías dio su manto a Eliseo y lo llenó de su espíritu en su partida.

    -S. Pablo: revístanse de Cristo: vestirnos con el manto de sus virtudes.

  • Pertenencia a María: Llevamos una marca que nos distingue como sus hijos escogidos. El escapulario se convierte en el símbolo de nuestra consagración a María.

    Consagración: ´pertenecer a María´ es reconocer su misión maternal sobre nosotros y entregarnos a ella para dejarnos guiar, enseñar, moldear por Ella y en su corazón. Así podremos ser usados por Ella para la extensión del Reino de su Hijo.

    -En 1950 Papa Pío XII escribió acerca del escapulario: "que el escapulario sea tu signo de consagración al Inmaculado Corazón de María, lo cual estamos particularmente necesitando en estos tiempos tan peligrosos". Quien usa el escapulario debe ser consciente de su consagración a Dios y a la Virgen y ser consecuente en sus pensamientos, palabras y obras. Dice Jesús: "Cargad con mi yugo y aprended de mi, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis descanso. Porque mi yugo es suave y mi carga ligera". (Mt 11:29). El escapulario simboliza ese yugo que Jesús nos invita a cargar, pero que María nos ayuda a llevar. El escapulario es un signo de nuestra identidad como cristianos, vinculados íntimamente a la Virgen María con el propósito de vivir plenamente nuestro bautismo. Representa nuestra decisión de seguir a Jesús por María en el espíritu de los religiosos pero adaptado a la propia vocación, lo que exige que seamos pobres, castos y obedientes por amor.

    Al usar el escapulario constantemente estamos haciendo silenciosa petición de asistencia a la Madre, y ella nos enseña e intercede para conseguirnos las gracias para vivir como ella, abiertos de corazón al Señor, escuchando su Palabra, orando, descubriendo a Dios en la vida diaria y cercanos a las necesidades de nuestros hermanos, y nos está recordando que nuestra meta es el cielo y que todo lo de este mundo pasa. En la tentación, tomamos el escapulario en nuestras manos e invocamos la asistencia de la Madre. Kilian Lynch, antiguo general de la Orden dice: "No lleguemos a la conclusión de que el escapulario está dotado de alguna clase de poder sobrenatural que nos salvará a pesar a pesar de lo que hagamos o de cuanto pequemos...Una voluntad pecadora y perversa puede derrotar la omnipotencia suplicante de la Madre de la Misericordia."


  • El suave yugo de Cristo: "Carguen sobre ustedes mi yugo y aprendan de mi, porque soy paciente y humilde de corazón, y así encontrarán alivio. Porque mi yugo es suave y mi carga liviana". (Mt 11:29-30)

    -El escapulario simboliza ese yugo que Jesús nos invita a cargar pero que María nos ayuda a llevar.

    Quién lleva el escapulario debe identificarse como católico sin temor a los rechazos y dificultades que ese yugo le traiga.

    Se debe vivir lo que significa

    El escapulario es un signo de nuestra identidad como católicos, vinculados de íntimamente a la Virgen María con el propósito de vivir plenamente según nuestro bautismo. Representa nuestra decisión de seguir a Jesús por María en el espíritu de los religiosos pero adaptado a la propia vocación. Esto requiere que seamos pobres (un estilo de vida sencillo sin apegos materiales), castos y obedientes por amor a Dios.

    En momentos de tentación, tomamos el escapulario en nuestras manos e invocamos la asistencia de la Madre, resueltos a ser fieles al Señor.

    Ella nos dirige hacia el Sagrado Corazón de su Hijo Divino y el demonio es forzado a retroceder vencido.

    Imposición del Escapulario:

    El primer escapulario debe ser bendecido por un sacerdote e impuesto por él mientras dice:

    "Recibe este escapulario bendito y pide a la Virgen Santísima que por sus méritos, lo lleves sin ninguna mancha de pecado y que te proteja de todo mal y te lleve a la vida eterna"


    ¿Puede darse el escapulario a quien no es católico?

    Sí. El escapulario es signo de la Maternidad Espiritual de María y debemos recordar que ella es madre de todos. Muchos milagros de conversión se han realizado en favor de buenos no-católicos que se han decidido a practicar la devoción al escapulario.


    Conversiones.

    Un anciano fue llevado al Hospital de San Simón Stock en la ciudad de Nueva York, inconsciente y moribundo. La enfermera al ver al paciente con el Escapulario Carmelita llamó a un sacerdote. Mientras rezada las oraciones por el moribundo, éste recobró el conocimiento y dijo: "Padre, yo no soy católico". "¿Entonces, ¿por qué está usando el Escapulario Carmelita?", preguntó el sacerdote. "He prometido a mis amigos usarlo", explicó el paciente. "Además rezo un Ave María diariamente." "Usted se está muriendo" replicó el sacerdote. "¿Quiere hacerse católico?" ´Toda mi vida lo he deseado", contestó el moribundo. Fue bautizado, recibió la Unción de los Enfermos antes de fallecer en paz.


    Alerta contra abusos:

    El escapulario NO salva por sí solo como si fuera algo mágico o de buena suerte, ni es una excusa para evadir las exigencias de la vida cristiana. Mons. Kilian Lynch, antiguo general de la Orden Carmelita nos dice: "No lleguemos a la conclusión que el escapulario está dotado de alguna clase de poder sobrenatural que nos salvará a pesar a pesar de lo que hagamos o de cuanto pequemos... Una voluntad pecadora y perversa puede derrotar la ´omnipotencia suplicante´ de la madre de la misericordia."

    Los Papas y Santos han muchas veces alertado acerca de no abusar de la promesa de nuestra madre como si nos pudiéramos salvar llevando el escapulario sin conversión. El Papa Pío XI nos advierte: "aunque es cierto que la Virgen María ama de manera especial a quienes son devotos de ella, aquellos que desean tenerla como auxilio a la hora de la muerte, deben en vida ganarse dicho privilegio con una vida de rechazo al pecado y viviendo para darle honor."

    Vivir en pecado y usar el escapulario como ancla de salvación es cometer pecado de presunción ya que la fe y la fidelidad a los mandamientos es necesaria para todos los que buscan el amor y la protección de Nuestra Señora.

    San Claude de la Colombiere advierte: "Tu preguntas: ¿y si yo quisiera morir con mis pecados?, yo te respondo, entonces morirás en pecado, pero no morirás con tu escapulario."

  • Oración a la Virgen del Carmen

    Súplica para tiempos difíciles

    "Tengo mil dificultades: ayúdame.
    De los enemigos del alma: sálvame.
    En mis desaciertos: ilumíname.
    En mis dudas y penas: confórtame.
    En mis enfermedades: fortaléceme.
    Cuando me desprecien: anímame.
    En las tentaciones: defiéndeme.
    En horas difíciles: consuélame.
    Con tu corazón maternal: ámame.
    Con tu inmenso poder: protégeme.
    Y en tus brazos al expirar: recíbeme.
    Virgen del Carmen, ruega por nosotros.
    Amén."

    viernes, 8 de junio de 2012

    Agresiones Impunes a Católicos de México en el Jueves de Corpus Christi


    La Arquidiócesis Primada de México condenó las “agresiones impunes” contra católicos del Distrito Federal durante la procesión de la Solemnidad del Corpus Christi (cuerpo y sangre de Cristo) encabezada por el cardenal Norberto Rivera en las inmediaciones de la plancha del Zócalo capitalino.A través de un comunicado la Arquidiócesis acusó a “provocadores profesionales ligados a grupos del Partido de la Revolución Democrática (PRD)” que “profanaron un acto de culto gritando insultos al paso del Santísimo Sacramento, en su recorrido por el Zócalo”.

    EL COMUNICADO:


    Los católicos de la ciudad de México seguimos siendo vulnerables e indefensos ante las agresiones de personas intolerantes, enemigos de la fe, como quedó de manifiesto durante la procesión de este Jueves de Corpus Christi, cuando provocadores profesionales ligados a grupos del Partido de la Revolución Democrática, profanaron un acto de culto gritando insultos al paso del Santísimo Sacramento, en su recorrido por el Zócalo.
    La libertad de expresión de los católicos no está garantizada en la así autodenominada “Ciudad de las Libertades”. Cuando hay manifestaciones callejeras de otros grupos en el Distrito Federal, el gobierno de la ciudad ha enviado hasta 500 policías para la protección de estas personas a fin de garantizar su libertad de expresión; la Policía del Distrito Federal fue incapaz de actuar de manera preventiva para evitar la provocación de las mismas personas que cada domingo, auspiciadas por el PRD se instalan en la calle de Madero para gritar ofensas contra el Papa, la Iglesia y los católicos, a pocos pasos de la Catedral.
    Cabe señalar que este Jueves de Corpus, la conducta de los maestros que sostienen un plantón en la plancha del Zócalo fue respetuosa, e incluso, muchos de ellos se sumaron a la tradicional procesión con el Santísimo.
    Nada hizo, sin embargo, la Policía capitalina para prevenir y evitar las provocaciones que cada domingo y fiestas religiosas realizan este reducido grupo de personas y que han participado en las continuas agresiones y ofensas a la fe que han tenido que sufrir los católicos en las misas que se celebran en la Catedral de México, como el Semanario desde la Fe lo ha evidenciado con fotografías en repetidas ocasiones.
    Lamentamos esta agresión a la fe del pueblo católico y pedimos a Dios el perdón para quienes sin un mínimo de tolerancia ofenden a su Persona Divina y a la fe de los católicos cuya libertad de culto y expresión no está garantizada en la ciudad de México, única ciudad del país donde suceden estos hechos tan deplorables
    fuente: www.siame.mx

    jueves, 7 de junio de 2012

    EL SANTISIMO

    No es mi intención ser chocante, ni trato de juzgar a nadie, yo misma tengo aun muchas carencias, no soy quien para señalar a nadie, a mi parecer es importante conocer este tipo de protocolos, recordemos que cuando El Santísimo esta expuesto ahí se encuentra vivo y presente Dios mismo, ¿con cuanta diligencia y respeto creen ustedes que debemos dirigirnos hacia el?.
    aquí algunas indicaciones básicas, espero les sean de utilidad.

    Al entrar en una iglesia, si está El Santísimo expuesto, se debe hacer la genuflexión arrodillándonos con las dos rodillas, inclinando la cabeza y persignarnos. Si no está expuesto El Santísimo, basta arrodillarnos en una sola rodilla, la derecha, mientras se inclina la cabeza y nos santiguamos.

    Cabe hacer mención de la postración, quizá habrán tenido oportunidad de ver algunas personas que no solo se arrodillan pero permanecen con la cara frente al suelo inclusive tocan con la su nariz el piso en señal de reverencia o de penitencia, esto se hace generalmente  como símbolo de máxima adoración, sin que sea necesario realizarlo permanentemente.

    Para aquellas personas que no se pueden arrodillar durante la exposición de El Santísimo, se permite permanecer de Pie en actitud reverente.

    Es importante guardar tanto silencio como nos sea posible, por respeto mayormente a la oración de los demás, ya que estamos en presencia de Dios Nuestro Señor, y siendo este un momento de incalculable intimidad con el, seamos respetuosos y condescendientes con los demás, así como caritativos con los que por cualquier motivo, no puedan guardar silencio.

    Por favor NUNCA DES LA ESPALDA A DIOS NUESTRO SEÑOR, por ningún motivo, ni circunstancia. No es un símbolo, en El Santísimo se encuentra vivo y amoroso, en el se encuentra todo el cuerpo, sangre, alma y divinidad de Jesús, creelo, vivelo!

    ¿Cómo será nuestro vestido?
    Como la suprema autoridad de la Iglesia es el Papa, si el Santo Padre ordena que se entre en la iglesia con mangas largas, aunque haga calor, en verano, hay que bajar la manga en la iglesia.

    Sean discretos al vestir, y considerada este no es un lugar para exibirte, tampoco un gimnasio, ni un parque, vas a estar en presencia del Dios amoroso que te creo para vivir plenamente, presentate ante el con belleza y cuidado a tu persona, vas a estar en presencia del Rey de Reyes y Señor de Señores.

    ¿Cómo debemos caminar?
    Se evitará el taconeo y el pasar sin atención o respeto ante los altares. (Se debe hacer la genuflexión cuando estén dando la Comunión o haya Misa.) Se debe hacer la genuflexión delante  del altar del Sagrario.

    EUCARISTIA


    ¿Qué es la Eucaristía?
    La Eucaristía es uno de los siete Sacramentos. Nos recuerda el momento en el que el pan y el vino se convierten en el Cuerpo y en la Sangre de Cristo. Éste es el alimento del alma. Así como nuestro cuerpo necesita comer para vivir, nuestra alma necesita comulgar para estar sana. Cristo dijo: "El que come mi Carne y bebe mi Sangre, tiene vida eterna y yo lo resucitaré el último día."

    ¿En qué nos ayuda la Eucaristía?
    Todos queremos ser buenos, ser santos y nos damos cuenta de que el camino de la santidad no es fácil, que no bastan nuestras fuerzas humanas para lograrlo. Necesitamos fuerza divina, de Jesús. Esto sólo será posible con la Eucaristía. Al comulgar, nos podemos sentir otros, ya que Cristo va a vivir en nosotros. Podremos decir, con San Pablo: "Vivo yo, pero ya no soy yo, sino Cristo quien vive en mí."

    ¿En qué parte de la Misa se realiza la Eucaristía?
    Después de rezar el Credo, se llevan a cabo: el ofertorio, la consagración y la comunión.
    Ofertorio: Es el momento en que el sacerdote ofrece a Dios el pan y el vino que serán convertidos en el Cuerpo y la Sangre de Cristo. Nosotros podemos ofrecer, con mucho amor, toda nuestra vida a Dios en esta parte de la Misa.
    Consagración: Es el momento de la Misa en que Dios, a través del sacerdote, convierte el pan y el vino en el Cuerpo y en la Sangre de Cristo. En este momento nos arrodillamos como señal de amor y adoración a Jesús, Dios hecho hombre, que se hace presente en la Eucaristía.
    Comunión: Es recibir a Cristo Eucaristía en nuestra alma, lo que produce ciertos efectos en nosotros:
      1. nos une a Cristo y a su Iglesia,
      2. une a los cristianos entre sí,
      3. alimenta nuestra alma,
      4. aumenta en nosotros la vida de gracia y la amistad con Dios,
      5. perdona los pecados veniales,
      6. nos fortalece para resistir la tentación y no cometer pecado mortal.
    ¿Qué condiciones pone la Iglesia para poder comulgar?
    La Iglesia nos pide dos condiciones para recibir la comunión:
    1. Estar en gracia, con nuestra alma limpia todo pecado mortal.
    2. Cumplir el ayuno eucarístico: no comer nada una hora antes de comulgar.
    ¿Cada cuánto puedo recibir la Comunión Sacramental?
    La Iglesia recomienda recibir la Comunión siempre que vayamos a Misa. Es obligación recibir la Comunión, al menos, una vez al año en el tiempo de Pascua, que son los 50 días comprendidos entre el Domingo de Resurrección y el Domingo de Pentécostes

    ¿Qué hacer después de comulgar?
    Se recomienda aprovechar la oportunidad para platicarle a Dios, nuestro Señor, todo lo que queramos: lo que nos alegra, lo que nos preocupa; darle gracias por todo lo bueno que nos ha dado; decirle lo mucho que lo amamos y que queremos cumplir con su voluntad; pedirle que nos ayude a nosotros y a todos los hombres; ofrecerle cada acto que hagamos en nuestra vida.

    ¿Qué hacer cuando no se puede ir a comulgar?
    Se puede llevar a cabo una comunión espiritual. Esto es recibir a Jesús en tu alma, rezando la siguiente oración:

    "Creo, Jesús mío, que estás realmente presente
    en el Santísimo Sacramento del altar.
    Te amo sobre todas las cosas
    y deseo ardientemente recibirte dentro de mi alma,
    pero no pudiendo hacerlo sacramentalmente,
    ven al menos espiritualmente a mi corazón.
    Quédate conmigo y no permitas que me separe de ti.
    Amén"

    fuente:www.catholic.net

     

    martes, 5 de junio de 2012

    CONVERSION

    Conversión se define como: la práctica religiosa por la que una persona adopta como propias las creencias de la comunidad de creyentes a la que se incorpora.

    Pero ¿cuál es la verdadera conversión? es simplemente ir a misa y rezar el rosario? (ambas acciones muy favorables y agradables a Dios).

    Al punto al que me quiero referir es al hecho de llevar la conversión a todos y cada uno de los aspectos de nuestra vida, a cada minuto, reconocer que nuestra fe es activa y practicante...que hay que llevarla a cada evento del día, no esta aislada ni la llevamos acabo únicamente dentro del templo, en el grupo o la comunidad.

    Lo que te propongo es llevar la conversión a todos los aspectos de tu vida, es: levantarnos con una alabanza en los labios para agradecerle al buen Dios la oportunidad de ver el sol una vez mas y consagrarle nuestro día, es dar gracias por la familia, (aunque mi marido no sea mi favorito este día, o mis hijos no ayuden mucho con los calcetines, o mi mama ya me esta apurando, o mi hermano que no coopera!), por el café (si alabado sea Dios por el café de la mañana), por el desayuno... por la escuela, el camión, los maestros,  el receso, el refrigerio, el agua, por la salida, por la comida, por el que se me atravesó en el carro, ¡gloria a Dios! por el que no sabe manejar y el que va a vuelta de rueda, por el recibo de luz, agua, teléfono, cable (¡bendita sea la madre Angélica! y el EWTN), por el celular(porque ahí me llegan mis mensajes de 5 minutos de oración), por mama (besito), por papa(besito), por el baño, por la siesta, por la alegría de vivir y poder darle ¡gloria a Dios! cada día, por todas las bendiciones que recibimos.

    Es estar dispuesto a dar una sonrisa, a ser testimonio de vida, no solo de palabra, pero con cada acción de nuestra vida, alabar a Dios con los buenos días, con los "5 minutos sin sacar la garra" por el silencio, por la alabanza, por la alegría de sabernos hijos de Dios, por al gracia de ponernos en el lugar del otro y crecer en la caridad.

    ¡Niños! vivamos una conversión que nos eleve por sobre todas las carencias, por sobre todos los dolores, por sobre todas las debilidades, por sobre todas las dudas, una conversión que grite:... ¡SOY EL HIJO FAVORITO DE DIOS! lo reconozco, lo vivo y me encantaría que tu lo sintieras como yo... ven deja que el amor de Dios llene tu corazón y te aseguro que no querrás dejar de sentirlo...nunca. 

    lunes, 4 de junio de 2012

    BIENVENID@S

    Se Bienvenido a este espacio que creamos para darle gloria a Dios Nuestro Señor y para ti, para compartir, nutrirnos, crecer.

    Acompañanos, comparte con nosotros; para alegremente, reconocer su infinito amor, su misericordia y alabarlo.

    Nos encomendamos a la intercesion de Nuestra amorosisima Madre, María de Guadalupe, y al Espiritu Santo en la confianza de que escuchará nuestra oración de amor...

    Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagracion perfecta y absoluta de todo mi ser, que os hago en este día para que os dignéis ser en adelante, en cada uno de los instantes de mi vida, en cada una de mis acciones, mi director, mi luz, mi guía, mi fuerza, y todo el amor de mi corazón.
    Yo me abandono sin reservas a vuestras divinas operaciones, y quiero ser siempre dócil a vuestras santas inspiraciones.
    ¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María y en María, según el modelo de vuestro amado Jesús. Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor. Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén